Objetivos para 2017

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Por octava vez consecutiva, escribo mis propósitos de año nuevo para que -en el fragor de la batalla, cuando las balas silvan por encima de tu cabeza y uno sólo puede aplastarse en la trinchera- me ayuden a no perder nunca la perspectiva de lo que realmente es importante.

2016: TRANSICIÓN Y EVOLUCIÓN

Si algo me ha enseñado el 2016 es que da igual que cumplas o no los objetivos que te marques, el triunfo se mide por la gente que quiere acompañarte en el camino.

He acabado este año agotado física y mentalmente, con la sensación de haber estado corriendo constantemente sin llegar a ningún lugar en concreto. Afortunadamente, escribir estos propósitos anuales me permite comprobar las metas que ya he cruzado y las que aún me quedan por alcanzar:

TRABAJAR EN LA EMPRESA MÁS DIVERTIDA DEL MUNDO: Sigo en ello, pero he hecho muchos progresos. Durante este año he tenido la oportunidad de colaborar con cinco equipos de trabajo distintos y tengo mucho más claro que hace 365 días lo que funciona y lo que no para generar el mejor ambiente en el día a día. INTENTÁNDOLO 

SALIR DE TRABAJAR, COMO MÁXIMO, A LAS 18:00H: Muchos días me voy a dormir con los niños a las 21:30h y estoy en pie, contestando correos, a las 5:00h. Muchos días no he llegado a casa hasta las 20:30h. La jornada laboral de ocho horas sigue lejos, pero por lo general, he racionalizado mis horarios y estoy satisfecho. HECHO 

SACARME EL CARNET DE CONDUCIR: Sin paños calientes, un EPIC FAIL que se está convirtiendo en una desagradable costumbre. En mi defensa, cuando ya estaba apunto de matricularme -hasta visité la autoescuela- he tenido que afrontar un fin de año particularmente complicado profesional y personalmente… pero, con 39 añazos, eso no son más que excusas. FALLO 

PREPARAR DOS MARATONES: Corrí y acabé las maratones de Madrid y de Bilbao… sólo para descubrir que lo que realmente me gusta -y mejora mi salud- son los entrenamientos de fin de semana con Yeray, Miguel, Molpe o Guillermo. HECHO 

REVIVIR MI BLOG: hay mucho trabajo por hacer, pero si en 2015 escribí un único post, este último año conseguí escribir uno al mes de media y, por primera vez, estoy intentando entender WordPress más allá de usarlo. HECHO 

TARUGOCONF: Lo hicimos. En plural. Gracias al esfuerzo y al cariño de mucha gente. Fue una maravillosa locura que me hizo pasar muchas noches en vilo, pero con la que conseguí aprender mucho más. HECHO 

¿Y EN 2017?

En 2017 me apetece dejar de correr para centrarme en crecer. Llevo mucho tiempo reinventándome cada año, en este quiero volcar toda la experiencia que he acumulado en empezar menos cosas nuevas y desarrollar las que ya he empezado.

SACARME EL CARNET DE CONDUCIR: En serio. Después de las vacaciones de Navidad me matricularé y me reservaré una hora todos los días, antes de volver a casa, para estudiar. Aunque sea en una cafetería. Así hasta que me lo saque o abandone miserablemente.

PREPARAR (BIEN) UNA MARATÓN: Sólo una, pero bien. Puede que me apunte a algún club de corredores o, simplemente, que siga una dieta sana y haga ejercicio de gimnasio más allá de los entrenamientos, pero para mi la maratón es una excusa para llevar una vida sana todo el año y reprimir el voraz tragón que hay en mi. Objetivo Estocolmo, el próximo 3 de junio.

HACER CRECER MI BLOG: 2017 será el año del podcast y del newsletter… por eso yo voy a invertir tiempo en mi blog intentando recuperar el espíritu de bitácora personal. Por eso podéis esperar tanto artículos técnicos como de restaurantes o vinos, antiguos artículos de la Bonilista revisitados y actualizados o… hasta textos en inglés. STAY TUNED!

TARUGOCONF 2017: Al 99% de los asistentes de la pasada edición les encantó el evento y a mi también, así que, para este año podéis esperar lo mismo, pero MÁS y MEJOR. Ya hay fecha y lugarel 22 de septiembre de 2017, en Madrid.

TRABAJAR EN LA EMPRESA MÁS DIVERTIDA DEL MUNDO: O, al menos, continuar intentándolo. Año nuevo, vida nueva y proyectos nuevos. Voy por buen camino.

PASAR TIEMPO DE CALIDAD CON MI FAMILIA: Ya no me obsesiona trabajar sólo ocho horas. Ni siquiera estar a una hora determinada en casa, sino CÓMO estoy. Prefiero llegar una hora más tarde, pero dejar el ordenador en la oficina. Prefiero no hacer jornada intensiva los viernes, pero después olvidarme del trabajo por completo durante el fin de semana. Lo necesito. Me necesitan.

¿Y TÚ?

El año pasado animé a la gente a que se sumara a mis propósitos de año nuevo, comentándolos o escribiendo los suyos propios. Algunos camaradas del metal lo hicieron y, 365 días después, es impagable releerlos.

Si te animas a acompañarme en esta aventura, no hace falta que recordarte que hoy más que nunca, mi blog es tu blog y con tus comentarios siempre lo enriqueces y mejoras ¡Gracias por estar ahí!